Indice del post
Hay dos series (linoléico y linolénico). Constituyen la vitamina F. Reciben el nombre de serie omega 6 (linoléico) que se encuentra en aceites de semillas de primera presión en frío y en las semillas y frutos secos.
serie omega 3 (linolénico) que se encuentra en las semillas de lino y pescados azules de aguas fría.
La serie omega 6 es broncodilatadora, antiagregante, antiinflamatoria, regula las hormonas: estrógenos, progesterona y prolactina, regula las secreciones sebáceas y el crecimiento.
La serie omega 3 es antiagregante, antitrombótica, antiinflamatoria y estimulante de la contracción muscular. Sus transformaciones se realizan en el hígado y se inhiben por grasas saturadas, estrés, azúcares, envejecimiento, poca insulina, deficiencia de zinc, cambios hormonales, radiaciones, contaminación…
Su actividad biológica se destruye a partir de 70ºC .
Las prostaglandinas son sustancias que sintetizan las células a partir de los ácidos grasos esenciales, son una especie de hormonas locales con múltiples efectos:
- Las de la serie 2 presentes en alimentos de origen animal (lácteos, cerdo…) están relacionadas con los procesos inflamatorios que producen fiebre, rubor, edema y dolor y también favorece la secreción de moco en las paredes del estómago e intestino. Las grasas saturadas favorecen intensamente la síntesis de estas prostaglandinas de la serie 2. Tienen una gran potencia inflamatoria, unas mil veces más inflamatorias que la histamina.
- Las de la serie 1 proceden de los ácidos omega 6 y son antiinflamatorias y regulan las anteriores.
Resumiendo y aclarando:
El omega 6 o GLA (su principio activo) es ideal para resolver problemas relacionados con las hormonas femeninas: regula reglas, dolores menstruales, premenopausia, quistes del aparato reproductor, quistes de mamas, sequedad de mucosas; se emplea en la degeneración de las paredes de las neuronas (esclerosis
múltiple); en problemas de piel y sequedad de mucosas; en reacciones alérgicas. Y lo encontramos en las semillas de sésamo, aceite de borraja y onagra y en frutos secos.
El omega 3 o EPA y DHA (sus principios activos) es un ‘anticongelante natural’ que hace que los pescados no se ‘congelen’ a bajas temperaturas en el mar. Cuanto más frío sea el hábitat del pez más EPA tiene como la caballa, la merluza y la trucha. Regula la tensión arterial y mejora la circulación, evita la formación de trombos y baja el colesterol, triglicéridos y transaminasas. También se encuentra en el aceite de lino de primera presión en frío.
No debemos pasarnos con las tomas, pequeñas cantidades son suficientes. Los aceites deben ser de primera presión en frío y no se pueden calentar nunca. Los ácidos grasos esenciales pueden moderar los efectos cancerígenos de la radiación y de ciertas substancias químicas. Pueden inhibir el desarrollo de cáncer de mama y otros, regulando el funcionamiento del sistema inmunitario. No se ha establecido ningún mínimo diario de estos ácidos grasos, pero la mayoría de los estudios (no todos) sugieren que la proporción entre grasas omega-6 y omega-3 debería ser alrededor de 3:1.
De todas maneras se considera que es más importante abastecernos bien de omega-3 que de omega-6. El omega-3 lo encontramos en aceite de primera presión en frío de lino, en los huevos ecológicos, pescado azul fresco… El omega-6 en las semillas de sésamo… Si se hace una buena alimentación a base de cereales integrales y proteínas de buena procedencia no es necesario preocuparse por tomar suplementos de ácidos grasos esenciales.